siguenos en facebook siguenos en Google+ siguenos en Twitter Canal de youtube sígueme en Instagram sígueme en Tumblr Rss feed sígueme por Correo Con palabras de suerte...: septiembre 2013

martes, 17 de septiembre de 2013

Learn, live, hope.

Alguien me dijo una vez que desearía que todo fuese tan perfecto como en las películas. Que la vida tuviera su guión redactado, de tal manera que el final de cada historia terminara con un ''y fueron felices por siempre''. Esas historias en las que el amor es lo principal. Es un amor puro, con sentimiento. Un amor de verdad. De esos que duran toda la vida. Que no tienen fecha de caducidad. Por los que arriesgarías todo y más.
Pero luego te das cuenta de que nada es así. Abres los ojos y todo lo que querías, todo lo que deseabas se escapa entre tus dedos. Se desliza como una caricia. Como un suspiro. Y desaparece. Para siempre.
Porque la realidad es que en esta vida no hay ningún guión escrito para cada individuo. Para conseguir nuestros sueños, nuestros deseos e incluso ese final tan perfecto titulado ''y fueron felices'', hay que luchar por ello. Dejarnos de sueños y fantasías. Nosotros creamos, dirigimos y protagonizamos esa película que llamamos vida.
Si alguna vez quisiste a alguien, pudiste comprobar que la caducidad existe. Y que los finales felices casi nunca son ciertos, al igual que los finales tristes. Tan solo hay nuevos comienzos. Nuevas oportunidades. Y, a veces, no hay que desperdiciarlas.
Si tienes algún sueño por cumplir, lucha por él. Si tienes algún deseo que te recorre el pensamiento, satisfácelo. Y si echaste de menos a alguien a quien quisiste, díselo. Si no se actúa, como consecuencia tenemos el arrepentimiento.
En tu mano está escribir el guión de tu vida, de tu destino. No dejes de realizar ninguna de estas cosas por miedo, por vergüenza. Lucha por lo que quieres, cumple tus sueños y deseos y resuelve tus dudas antes de que sea demasiado tarde. De que te quedes con la intriga del ¿qué habría pasado?, ¿y si...?
Puede que detrás de todo esto, esté escrito tu final perfecto. Tu propio ''y fueron felices por siempre''.

''Quien no arriesga, no gana. Y sin esfuerzo, no hay recompensa.''


lunes, 16 de septiembre de 2013

Tragarse el orgullo de vez en cuando no engorda.

Esa persona a la que ignoramos por orgullo. A la que esquivamos para no ver su sonrisa, sus ojos, cuya mirada nos trae tantos recuerdos. En el fondo sabemos que esa persona es a la que más echamos de menos y a la que necesitamos a nuestro lado.
Así es la realidad. Y así de tonto es el ser humano. Prefiere sufrir que pasear de la mano con su felicidad.


martes, 3 de septiembre de 2013

Querido Septiembre:

He notado que se acaba el verano. La fría brisa otoñal se colaba por las rendijas de mi ventana esta mañana temprano.
Hoy me he despertado con ganas de gritarle al mundo lo increíble que me siento después de tanto tiempo. Pero también me he despertado con la duda de si realmente conocemos el significado de echar de menos.
Un segundo de incertidumbre intermitente. Un punto y aparte en la sonrisa de mi día a día. Un suspiro de pura nostalgia, melancolía. Hoy no ha sido un día cualquiera. Ha sido diferente. Pensé: Ojalá solo sea un sueño y alguien me despierte. Pero no.
Me he sentado de madrugada en el poyete de mi ventana. He contado una a una las pocas estrellas que podían avistarse en el cielo nocturno de la ciudad madrileña. Me he detenido al ver la luna. Era llena y su luz era tan brillante que hasta a la propia mirada, asombrada por su perfección, cegaba. He pensado en ti. Sí. Después de un tiempo aislada del mundo, tu sonrisa se escapó de un recuerdo, haciéndoseme la garganta un nudo. No he podido evitarlo. Una lágrima se me ha escapado. ¿Por qué? Supongo que aquí podría encajar perfectamente la frase te echo de menos. Tendría toda la coherencia, cohesión y adecuación que nosotros queremos. De vez en cuando me da por sonreír al ver tu foto y me siento afortunada al pensar que hubo un tiempo en que te hice la persona más feliz del mundo. Pero eso ahora ya da igual. Es cosa del pasado y eso lo tengo ya muy olvidado. Puede que algún día nos encontremos, hablemos y sonriamos de nuevo. Quién sabe. Hasta entonces me despido. Sigo mi camino. No sé a qué destino llegaré ni si alguna vez volveré. Solo me queda decirte que sí, aquí seguiré para ti y espero que tus besos y caricias hagan feliz a alguien como un día me lo hicieron a mí.

Hasta el próximo choque de miradas,
Punto y final.

''Dicen que no echamos de menos algo hasta que lo perdemos. Eso será cierto solo si se quiso de corazón y no por simple diversión.''